Desde el año 2020, durante el mandato del expresidente Donald Trump, comenzaron las primeras medidas restrictivas contra la plataforma china “Tik Tok” mediante una orden ejecutiva. Como respuesta, la plataforma digital logró que se obstruyera la orden del presidente Trump mediante acciones legales. Sin embargo, en el nuevo mandato presidencial de Joe Biden, se revocó la orden ejecutiva del expresidente Donald Trump para poder lograr una orden de revisión de seguridad nacional respecto a los datos del usuario y su protección a la privacidad. En el año 2022, la cámara de representantes de los Estados Unidos aprobó un proyecto de ley para prohibir la plataforma en dispositivos usados por el gobierno. Posteriormente en el 2024, el senado aprobó una ley que implica la venta de las operaciones de dicha plataforma en unos meses o en caso de negarse a una prohibición de la plataforma.
Según los políticos estadounidenses, el origen del conflicto estaría en una posible recopilación y obtención de los datos de los usuarios norteamericanos por parte del gobierno chino mediante la empresa llamada “Byte Dance”. Por lo que desde el 2020 iniciaron las acciones legales anteriormente nombradas con el propósito de proteger la integridad de los datos y privacidad de los usuarios estadounidenses. A pesar de esto, la aplicación china manifiesta que se adhiere a las normas de la industria respecto a los datos de los usuario.
En una audiencia realizada el jueves 23 de marzo de 2023, los senadores estadounidenses citaron al CEO de la plataforma “Tik Tok” llamado Shou Zi Chew, con el fin de discutir sobre las preocupaciones, opiniones y argumentos. Sin embargo, se demostró que los senadores no estaban lo suficientemente preparados al carecer de conocimiento básico de la industria tecnológica. Principalmente porque esta era una reunión que requería de una preparación adecuada para abordar el tema de protección del usuario ya que esta era la mayor preocupación por parte de los políticos estadounidenses.
Como resultado, se formularon preguntas incongruentes por parte de los senadores, como la del Sr. Crenshaw diciendo “los ciudadanos chinos deben cooperar con la inteligencia china cuando se les requiere y si se les requiere, están obligados al secreto, eso lo incluiría a usted«. Inmediatamente el CEO respondió: «Soy singapurense«. Luego, el Sr. Carter preguntó “¿Cómo determinan la edad de los usuarios?”, a lo que el CEO respondió “Nos apoyamos en el ‘age gating’ y mirar los videos que publican”. El senador Carter respondió “Esto da miedo, cuéntame más sobre eso”. Y el CEO termina diciendo “Es público» (refiriéndose al contenido del usuario).
Esto demostraría no sólo la poca preparación de los anteriormente mencionados sino el interés especialmente en que la empresa sea de origen chino. Un ejemplo es el Sr. Soto al declarar lo siguiente: “Entonces, señor chew, ¿estaría Tik Tok preparado para desvincularse de Byte Dance y el Partido Comunista Chino si el Departamento del Tesoro les ordenara que lo hicieran”, a lo que el CEO respondió “Congresista, como dije en declaracion de apertura, creo que debemos abordar el problema de la privacidad, estoy de acuerdo con usted . No creo que la propiedad sea el problema aquí. Con mucho respeto, las empresas sociales estadounidenses no tienen un buen historial con la privacidad de datos y seguridad del usuario por ejemplo Facebook y Cambridge Analitica”.
Recordemos brevemente el caso de “Cambridge Analytica”, una compañía cuya sede se encontraba en Londres (Inglaterra) que trabajaba para la empresa estadounidense “Facebook», renombrada posteriormente como “Meta”. Dicha empresa fue acusada de usar los datos de millones de usuarios sin previa autorización para emplearlos en las elecciones estadounidenses. Esto demostraría que no solo una empresa de origen chino con un CEO singapurense puede tener malas prácticas o fallos en su sistema de seguridad. Incluso, una empresa tan grande como Facebook puede pasar por eso, ya que después de unos años pagaría una multa millonaria de US$ 5.000 millones como sanción por las malas prácticas en el manejo de la seguridad de datos de los usuarios.
Si el verdadero interés de los senadores es velar por la privacidad de los usuarios y evitar que esta sea vulnerada, la mejor opción sería un debate sobre proyectos como el de Texas. Proyectos que podrían establecer medidas o normas para mejorar la eficacia de los sistemas de protección de datos para los usuarios. En este sentido, es importante destacar que las fallas en la protección de datos no se limitan a empresas como TikTok (de origen chino) o Facebook (de origen estadounidense), sino que pueden afectar a cualquier compañía, independientemente de su origen. Por lo tanto, se requieren medidas de protección de datos que sean aplicables a todas las empresas, tanto nacionales como extranjeras.
Nicole Tasca
Redactora de la Sección de Norteamérica
Estudiante de Relaciones Internacionales